FRONTAL

La artesanía transforma la envejecida faz de nuestro corcel que suma eternas temporadas, hasta lograr una estética de morador del Olimpo tuner inmortal. En el capó la modificación se inició por el orgullo de sus tiempos de juventud, doble entrada tipo gota de agua con branquias de corte real, las primeras entradas de aire que conocimos los más veteranos. La fisonomía del frontal como en los grandes proyectos barrocos, siguieron lo dictado por la sustitución de las ópticas por las procedentes de otro modelo, en este caso los angel eyes de fondo cromado de un Audi A3. Ello impuso el acondicionamiento en aletas, más un trabajo mayor en el capó, donde se procedió a amoldarse a las líneas superiores de ellas, con alisado central del vértice y anagrama ovalado.

La defensa se le modificó al corcel, los perfiles griegos y más en el Olimpo tienen que ser perfectos, que mejor que la mítica Erebuni, con sus quíntuples aperturas más míticas en España que las portadas por los dioses de la famosa saga. En su boca central, detalle muy “Old School”, pero portados en muchos proyectos aquí mostrados y homologable, las barras de aluminio horizontales en paralelo fijadas en los laterales de las aperturas como enrejillado.

Para atravesar la niebla cuando atraviesa las nubes fronterizas al Olimpo, luces para tal menester en las aperturas laterales de la defensa y en su parte central inferior, matrícula de tamaño reducido.

Pegaso luce estampa vetusta, los marcos superiores de las puertas le delatan, pero en esas cotas nos muestra su clase suprema, con un laminado totalmente homologable donde el toque azul que se observa en Mercedes de alta gama, le da un punto más de intensidad a ese color, siendo traslúcido pero muy azul celestial, cosas de andar entre dioses.

Su carrocería fue alisada hasta convertirla en semi monoblock, sólo se permitió ser independiente a la defensa delantera. La repetición de intermitencia se eliminó de la aleta para pasar a los retrovisores, adaptados con bellísima composición doble en cada uno de ellos.

Su musculatura fué acrecentada con ensanches en aletas con 7 cm por cada una, en la trasera alcanzando las puertas pero sin querer ser voluminosos, como si aletines desmesurados fueran. Las taloneras de artesanal adaptación con apertura posterior, lucen sobredimensión para acompasar con las aletas trabajadas.

En los pasos de rueda luce el cromo del destello cuando miras al sol encomendándote a los dioses, más aún cuando atacas los badenes con una amortiguación de serie como es el caso. Las mencionadas llantas son unas bellísimas Stone Limited en 17” con gomas 205/40, generosa banda de rodadura para vetusto corazón, que reposta a través de la implantación de un tapón tipo aviación universal Sparco.

La zaga de un corcel es uno de los puntos donde tiene que mostrar belleza, como si la cola fuera enorme alerón especifico en fibra con tercera luz de freno incorporada. La fama se la llevó el del Rs Cosworth, pero antaño éste fué otro gran deseado. Sus palas laterales se extienden por todo el portón, en este caso unificado a él.

En el portón y aletas hubo que hacer magia artesana, para la implantación de los pilotos tipo Lexus de fondo cromado, procedentes de un Bmw serie 3, conceden un “look” rejuvenecedor a la zaga. Sobre el portón el trabajo a realizar también recibió su alisamiento, con la consecuente eliminación del sistema de apertura.

La defensa es artesana partiendo de la de origen, para concederle las aperturas horizontales míticas de antaño, haciendo acto de presencia a través de la izquierda el escape Turdinas Tuning.

Sobre su superficie, los amigos de las revisiones periódicas le obligaron al ser mítico, portar los reflectantes a más de 40 cm, tontunas de los mortales con algo de poder.

El habitáculo cuando atraviesan los rayos de luz sus azules lunas, iluminan el bitono azul y blanco majestuoso. No hay un hueco sin haber sido concedido su dosis Tuning. Pegaso es bello por dentro y fuera.

En pintura azul se cubrió: cuadro de instrumentación, mitad inferior salpicadero, plásticos, aireadores y tiradores de puerta. En blanco se pintó: mitad superior salpicadero, consola central baja, guanteras de puertas y guantera de salpicadero.

Tapizados en piel fueron el resto de componentes, siendo en azul los pilares delanteros y centrales, más las fundas del cambio y freno de mano. En piel blanca se cubrió pilares traseros, bandeja, techo y suelo, mientras que alternando blanco y azul, se cubrió asientos y los paneles de puertas.

El volante es un Isotta de aro blanco y núcleo cromado, los pedales son de aluminio, así como el pomo, con parte superior de metraquilato con iluminación led, sin obviar el freno de mano con detalle azul.

Los paneles de puerta fueron modificados para albergar parte del car audio.

  EL TUNING ES BELLEZA