FRONTAL

Esta bella montura en semejanza a su versión cinematográfica, tiene una faz que por rasgos deberían mostrarte respeto, pero te genera simpatía por él, te arranca una sonrisa placentera ante su semplante.

Las doble ópticas circulares separadas te transmiten que estás ante un deportivo japonés, un Acura, modelo no tan conocido como otros de aquellas tierras, pero que con sólo realizar un trabajo artesano al prolongar su defensa en vertical muestra unas fauces temibles. Su gran boca central rectangular en tenebroso negro, son secundadas por otras similares a sus flancos, bajo las intermitencias traslúcidas de serie, muy semejantes a las del Toyota Celica de primeras generaciones. Ello es suficiente poder de presentación como fiera de las carreteras, pero es una historia de Fantasía y un reino de la imaginación que le concede el nombre, por ello el estilo monoblock le transporta desde los laterales sin darse cuenta gran volumen extra de ensanche por lateral al frontal, al ser este integral a su forma.

Falkor es un dragón sin alas, por ello no le hace falta aperturas verticales para volar, trasladándose a ras del firme gracias al rebaje al máximo de la suspensión regulable en altura y dureza de Koni. En La Historia Interminable se referían a él como un bello relámpago a cámara lenta en el cielo, tal vez fuera el rodar de sus llantas cromadas Alloy Technologies en 18” con gomas 235/35, a ras de su bello pelaje por los separadores de 8cm en eje anterior y 10 cm en posterior.

Su musculatura se apreciaba pero no como un dragón chino, los ensanches de 8 cm por lateral solo se hacían muestra de presencia en su avance desde la aleta trasera en busca de la delantera a través de la puerta. En ese recorrido inapreciable había varios detalles que revelaban su musculatura, como el tirador de puerta encastrado en una hendidura, el alcanzar la aleta delantera en generoso desnivel respecto al corte transversal de esta, con doble apertura en su canto vertical, el mismo doble relieve que luce en aleta sobre el propio ensanche. Otra muestra es la talonera artesanal sobredimensionada, que gracias al monoblock imperante alcanza sin interrupción la delantera, pero con vértice diagonal que la recorre, más la réplica sobre puerta a modo vértice saliente, descendente tras la típica apertura vertical que suelen lucir los tres puertas.

El único aporte fuera del blanco es del sistema de frenado pintado en rojo, dejándose observar a través del cromo.

La cola del dragón es mítica, detalle muy oriental, pero este Acura Falkor posee el propio en fibra aunque para nuestra Historia Interminable por Fantasía, fué modificado en sus patas para obtener mayor altura.

Sus pilotos traseros son específicos tipo Lexus, pero yo ello no implica que sea fácil su obtención, daría para otra fábula. El canteado donde se ubican, delatan el ensanche presente, como bien hemos indicado al ser en la totalidad de la carrocería de las aletas hacia sus extremos, estos detalles son quienes le muestra, más aún con monoblock presente.

La defensa recibe artesanía de nuevo en semejanza a la delantera, prolongación vertical para recibir “u” invertida en negro con deflectores verticales, donde se ubican los bellos silenciosos separados tipo moto de Race Sport.

Su alma rebosa bondad, es un dragón bueno en lucha por su mundo, qué mejor que el impoluto blanco para cubrir casi la totalidad de su habitáculo siendo monocromático todo lo inferior a las ventanas, ya que pilares y montantes están tapizados con tela símil piel de cebra.

En pintura blanca se cubrió: salpicadero, guantera, consola central, volante, consola central baja, cuadro de instrumentación, freno de mano, montantes, paneles de puerta, paneles trasero e incluso los plásticos.

Tapizados en piel blanca fueron los asientos, funda del cambio y pomo, más el cambio de esferas a blancas.

Un placer conducirlo más aún si a través de su techo eléctrico plegable, atraviesan los rayos del sol mientras vuelan por un mundo Tuning de Fantasía.

Para visionar su afamada película, fuente radio dvd de 2 din.

  EL TUNING ES BELLEZA