FRONTAL

El arte tiene multitud de tendencias cuando uno se refiere a la pintura. En la automoción tuvimos nuestras modas prepandémicas, al final lo atemporal es escoger la que te transmite a uno mismo, por ello escogió el azul "Blue Vivid" del catálogo de Honda, aderezado con purpurina de 2mm holográfica. Si queremos referirnos al arte de la pintura de retratación, también el Blue Art lo posee, siendo sobre el capó donde el artista de la aerografía de la zona centro de España, el señor Anibal, plasmó a un guerrero al galope sobre su corcél en actitud agresiva sobre fondo negro.

Las ópticas son de serie con el fondo negro y un daylight de única iluminación mediante bombilla y no led, siendo entre ellas acompañadas por la calandra de cerco cromado y anagrama de mismo brillo.

La defensa es artesana, el arte de la fusión, como es la adaptación del paragolpes del Cupra de gran boca central y aperturas romboidales en cota más inferior con antinieblas portados.

El corazón cuando transmite arte y le llena lo plasmado bombea más fuerte, por ello reprogramación del motor mecánico, donde pasó de 110 c.v. a 130 c.v.

La estampa de una berlina requiere arte para concederle carácter, siempre comentamos el desafío que es. Sobre una carrocería alisada, se procedió a concederle rasgos de arte tuner. Las puertas delanteras recibieron ese plus al realizar apertura, las bisagras LSDoors hacen su magia al alzarlas con contundencia y firmeza hacia el cielo. El cromo siempre reluce con mayor potencia con tonos oscuros, por ello las llantas Dotz en 17" con gomas 215/50, logran destacar ante la primera impresión al visionarlo. Entre ambos ejes la adaptación artesana de las taloneras, en un principio ellas eran destinadas al Vw Corrado, suman otro plus de personalidad a ésta obra de arte más del mundo tuner.

La repetición de intermitencia en los espejos retrovisores, ello de serie, culmina una belleza en versión berlina.

La zaga impone Tuning como bandera a mostrar. En lo alto alerón de Abs tipo import de la marca Zero. El portón de por sí alisado, únicamente con el anagrama de Seat como sistema de apertura hace acto de presencia. Los pilotos bitonos con mayoría en tono rojo de serie, son muy acertados con sus transparencias en contraste con ello, cierto es que las marcas acada vez diseñan con más ánimo de tuner, no teniendo que tratar esta zona.

La artesanía tuner regresa al tratar una defensa en este proyecto, siendo la suma de la defensa de serie, más la de un Seat Ibiza, cumplimentado con un deflector con inmensa "U" invertida, donde posee tres deflectores verticales y espacio en flanco inzquierdo para que asome el silencioso Duramás con cola añadida.

El habitáculo no ha sufrido grandes aderezos, se ha requerido detalles muy "old school", como aportar una franja roja con una tira de hilo de neón a travesando el salpicadero de izquierdas a derechas, más triple portamanómetros en el salpicadero. Los asientos recibieron una funda de tela azul y negro, más los pilares fueron pintados con motivos florales.