FRONTAL
Su estética es mítica, estamos ante un Vw Golf Mk2 Gti. Sus líneas crearon una adicción confirmada para muchos amantes del motor tras su primera versión, pero su propietario le quería conceder un look personalizado, entraba en el mundo del Tuning, pero con unas ideas muy claras, tenía que ser ligero para circuito. Su otra pasión que son los clásicos, le influyó para aportar componentes que la juventud no conoce su procedencia, como es la entrada vertical de aire en la parte alta del capó, como es la implantada del Seat Ronda, aquel compacto ochentero que ya recorrían el circuito del Jarama en su final como circuito de F1.
Su parrilla característica de enrejillado negro y banda roja, reclamando que es un vetusto motor pero un Gti, reprogramado de 112 c.v. a 130 c.v. más colectores sustituidos de Ta-Teknix, se acrecenta el respeto ante la mirada "bad boy" que otorga la pestaña de faros que abarca todo el frontal de Konig. Un detalle que marca el recuerdo de los inicios del Tuning en España.
La defensa es de conocida fisonomía, inmediatamente nuestro cerebro lo asocia con calidad, los más veteranos han ojeado su “tocho” de catálogo en cada mesa de taller Tuning, es un Rieger señores, especifico para el modelo con su gran apertura central prominente respecto a las secundarias, donde ha sido sustituido sus intemitencias por unas más modernas de cristal traslúcido. Su composición es de plástico Abs, idóneo para conceder ese look Tuning que atemorice cuando te aceche vuelta tras vuelta, antes de adelantarte sin subir de peso, la ligereza es básica para el circuito.
LATERAL
Su estampa está pensada para recorrer el circuito del Jarama con ligereza, por ello prescinde de usar taloneras, pero demanda mayor anchura para acometer las curvas, siendo ensanchado 4 cm entre goma y goma, pero 12cm en cada aleta. Estaréis pensando que si busca ligereza va en contra de crear un ensanche, pues no, ensanche realizado en plástico por su propietario, un año de aplicar capas y salir a rodar en busca de no rozar, pero el resultado es espectacular. Acompaña en su totalidad de altura a la defensa delantera y encaja a la perfección en su llegada a los bajos de las puertas delanteras, le concede fortaleza a la aleta trasera, remarcando como si hubiera una escasa talonera entre ejes, magnífico trabajo.
Los pasos de rueda fueron testigos de como ese espacio generado lo cubrían a base de más goma, escasa banda de rodadura inicial aún siendo Gti, calzando 195/50 con unas llantas de gran garganta y et, las ATS Cup de aluminio pulido de 15”, a ras de aleta gracias al rebaje de altura y consistencia de la suspensión Kayaba, quien se comporta extraordinario en el trazado madrileño, aunque el de Kotarr también los ha testado.
En lo alto otro toque retro, para no perder aerodinámica y estar refrigerado, en la parte frontal del techo solar del Golf Gti, un derivavientos de otro clásico, el Mercedes 190.
Los tiradores cromados a juego con los del interior y pasador, aderezan éste magnífico lateral tuner de carreras.
TRASERA
La zaga tiene aroma del Gti, con alerón tipo visera de serie más su defensa característica del modelo, con el saliente en flancos remarcadísimo, más la salida doble del silencioso procedente de tierras americanas especifico para el modelo, delicia sonora cuando ruge al avanzar en carrera.
Los pilotos son ahumados sí, pero los vende así Hella en su catálogo, un toque Tuning que concede a esta zaga este fabricante de calidad.
INTERIOR
Este habitáculo no destaca por sus tapizados en piel, es un Tuning destinado a correr de un amante de los clásicos. Por ello los asientos delanteros y plazas traseras fueron sustituidos por los de la versión “Rabbit” de su mismo modelo mk2, siendo el pomo de la versión “Special Edition” del mk3. Tuning modificar para personalizar, y así prosigue con el volante con aro de madera, “look” muy de habitáculos de los 80 y 90, del fabricante mayormente de faros y pilotos Hella.
Como buen amante de clásicos y a la par querer saber aprovechar conocimientos de mecánica para exprimirla en carrera, 4 medidores en la parte izquierda del salpicadero, no podían ser digitales, lo retro gusta más. Sus mediciones son para voltaje, presión aceite, depósito combustible y vacuómetro, para medición presión admisión.
EL TUNING ES BELLEZA