FRONTAL
Jamás a una persona ajena a este mundo tuner haría pasar por su mente ni un solo momento, que se trata de la primera generación del Hyundai Coupé en España, segunda a nivel mundial, «el Tiburón», ya que ha sido modificado en su totalidad. Presidiendo y como punto de partida, la instauración de las ópticas angel eyes del Toyota Celica, cuya implantación conllevó buenos quebraderos de cabeza, además de por su diseño, provocó el alargamiento en la longitud de un mayor voladizo, además del alargamiento de capó en fibra, adaptándose a las líneas marcadas tanto por ópticas como por la defensa procedente del Nissan 350Z. No se limitó a la implantación, modificando el capó hasta solo quedar de aquel diseño la boca central, quedando una faz del proyecto de líneas alisadas, a excepción del trabajado moldeado que se inició desde los faros, sin romper con la sensación "clean" extremo.
LATERAL
Su estampa es sin interrupciones, ya que aplica el estilo monoblock, como el alisamiento integral pero esta vez no es eliminar unas molduras, si no disolver vértices, líneas de diseño que atraviesan longitudinalmente la carrocería. Ello logrado gracias al ensanche inapreciable, aplicado en su totalidad en aletas, cuya parte visualmente apreciable a primera vista, típico ensanche de aletas, es como el acento en esa amplitud, un ensanche sobre ensanche.
Para rellenar tal paso de ruedas creado, separadores doble centraje de 9 cm en eje anterior y 14 cm en eje posterior empujando a ras de carrocería a las hermosísimas llantas cromadas de 20″ de diseño exclusivo realizado por el fabricante Zyllion, calzando con gomas 235/30. El componente rodante es compactado con la carrocería, cuando se activa descendente la suspensión neumática independiente Nibbeltec con doble compresor insuflando, para provocar la ascensión agil de la carrocería, incluyendo las taloneras artesanales.
TRASERA
La zaga es import total, y contra todo tópico, lo es sin alerón alguno que adorne su planta, siendo ésta de una redondez extrema al ser prolongada la original, casi a la duplicidad, en semejanza a la parte anterior del proyecto. Marcando ese alargamiento que conlleva mayor voladizo trasero, la implantación de pilotos traseros del Nissan 350Z de tecnología led en fondo negro, inmersos en unas líneas redondeadas que parten desde la parte baja de las cristaleras del lateral .
La defensa trasera de nuevo proviene del Nissan 350Z, modificada en su totalidad, a excepción del deflector central, incluyendo la reubicación de luces auxiliares habidas en él, como así fue realizado artesanal el sistema de escape, desde la zona intermedia hasta sendas colas las cuales asoman, una por lado bajo la defensa.
INTERIOR
Tapizado en piel íntegramente, alternando tonos rojo burdeos y negro, iluminando su belleza las siempre señoriales luces halógenas, en este caso 5, cuya luz se refleja en los cromados, y piedras Swarovski de los múltiples accesorios Isotta: pomo, pedales, reposapies, freno de mano y volante.
Las alfombrillas en tela roja, con relieve simulando los palillos de las típicas alfombrillas deportivas de aluminio.
Las escuetas plazas traseras fueron anuladas para mejor cabida del car audio, quedando solo los baquets de grandes orejeras Sumex GT3.
CAR AUDIO
El maletero con una bañera en fibra y posterior tapizado en el mismo tono rojo burdeos, alojando sistema de la suspensión y los 2 subwoofers invertidos de doble bobina e imán cromado Visonik de 12″, los 2 tweeters Pioneer, 2 medios Kenwood, capacitador, al igual que los amplificadores de 4 canales cada uno, de Pìoneer y JBL.
Dando señal a todo ello, la fuente Pioneer, así como un DVD a los parasoles con pantallas de 7″.
EL TUNING ES BELLEZA