FRONTAL
Denota agresividad, opción "old shool", con un "bad boy" impuesto en el capó de tal forma que a más de un inspector de línea se frotaría las manos. Lograda esa mirada con alargamiento de capó con el mismo relieve que marca de serie, anulando totalmente la calandra. Las ópticas especificas sobre las cuales el ceño fruncido las hace ocultarse, son unas daylights Sonar, a quienes se les concedió un toque mas «humano» con las formas concedidas debajo, sensación de ojeras con un objetivo similar como al aplicar pestañas en faro.
La defensa artesana, procedente del VW Scirocco, se amoldó a las medidas y anclajes de su primo menor, guiño a la familia vag, sumando agresividad por sus más que generosas aperturas.
El impacto visual frontal queda acentuado con la implantación en el techo de la entrada de aire, típica de rallies, del Subaru Impreza, otra joya que posee en su garaje, guiño racing en su preparación tuning.
En el vano motor, sí el 1,4 gasolina de serie era insuficiente, reprogramar también el filtro de admisión directa Green, sumaba pero… tiramos de swap, y si lo hacemos que no sea a medias tintas, motor del VR6 2800 CC con 184 CV, no limitándose a la caja de cambios, que es lo que te pide ITV para homologar toda la mecánica, se cambió al Ibiza para que de verdad su corazón sea de atleta.
LATERAL
La limpieza sin molduras, ya de serie, fue aumentada con la supresión en aletas de la repetición de intermitencia, más la implantación del estilo monoblock en la carrocería, uniendo las artesanales y rectas taloneras en fibra.
La voluminosidad viene concedida por los ensanches realizados en las aletas, musculando la carrocería 6 cm por lateral delante y 12 cm detrás, rellenando hueco, "old school", a base de goma, 225/40 delante y 245/40 detrás . Ello gira con las hermosísimas, pero de precio prohibitivo en estos tiempos y míticas 3 piezas de Braid, de núcleo dorado y aro pulido. Observador de privilegio junto al sistema de frenado del VW VR6, de como David maneja la altura del centro de gravedad a su antojo con la suspensión durísima de V-Maxx, regulable en altura.
TRASERA
Llegamos a la zaga, artesanía más deportividad, conjugación que se logra como cúmulo del montaje de piezas como la doble visera específica en diferentes alturas, remarcado con diferente tono al amarillo típico y color insignia de los modelos deportivos del utilitario español. Dicho tono grisáceo complementa el mismo tono del carbono de la estructura de los pilotos traseros tipo Lexus, venidos con estructura en relieve y sin tulipa.
La defensa aúna mas artesanía, ya que su procedencia viene dada del catálogo del Golf R32, recibiendo en su parte baja el deflector típico de modelos Ferrari, dejando entrever por sus deflectores verticales, el escape artesano desde el intermedio en acero inox, acabando en salida doble.
INTERIOR
Fué tapizado en su totalidad en piel crema y azul celeste, a excepción de la pareja de baquets y algunos plásticos, que recibieron dosis de pintura en los mismo tonos.
El volante Isotta, con piña cromada, es extraíble, como lo contrario era la fuente en este modelo, solución… poner en el techo una radio controlador Alpine con cargador de CD en maletero, los halógenos iluminan el interior al estar ubicados cercanos en lo alto del habitáculo .
Para controlar la bestia que lleva como nuevo corazón, 3 relojes adicionales en montante triple: rpm, presión de aceite y agua.
Un gran detalle es el laminado de todas las lunas, a excepción de la delantera, del típico vinilaje azul clarísimo que portan todos los Mercedes.
EL TUNING ES BELLEZA